La Alpujarra, como dijo el poeta granadino J. G. Ladrón de Guevara:
Guardan sus años
bajo la sombra
de los castaños.
Contra la tierra lucha,
y al cabo
pierden la guerra.
De vez en cuando
miran al cielo
canturreando.
Castaño de Haza del Lino
Castanea sativa
LOCALIZACIÓN
Paraje:
Haza del Lino
Término municipal:
Polopos
Espacio Natural Protegido:
No
PROPIEDAD
Privada
CARACTERÍSTICAS MORFOLÓGICAS
Altura total: 15,00 m
Altura del fuste: 4,00 m
Perímetro (a 1,30 m): 7,30 m
Perímetro en la base: 9,70 m
Diámetro de copa:
dirección N-S: 19,80 m
dirección E-W: 21,00 m
Proyección de la copa: 326,57 m2
Singularidad
El Castaño de Haza del Lino destaca por su tamaño y su edad, más de 300 años.
Este viejo ejemplar ha desarrollado un exuberante tronco, con un perímetro superior a los 7 metros. Tiene una cruz enorme de la
que salen robustas ramas maestras, una de ellas caída por poda natural, conformando una copa aparasolada.
Entorno.
Localizado en una finca cercada, se sitúa próximo a la carretera
que conduce de Torvizcón a Órgiva. Está ubicado en el extremo de una dehesa compuesta por alcornoques (Quercus suber), sobre un terreno con poca pendiente, de orientación sur y carácter arcilloso. La altitud a la que se encuentra es de 1.300
metros aproximadamente.
Un castaño centenario como símbolo de la Contraviesa.
Está ahí desde siempre. Todos los que conocen la carretera entre Órgiva y Albuñol saben que cuando divisan el gran castaño del Haza del Lino ya no hay que subir más, y la calzada empieza a bajar. Un castaño centenario, de más de 300 años, que está incluido en el catálogo de árboles singulares de Andalucía. Está en el interior de la finca. «Lo tuvimos que incluir dentro del vallado de parte de la finca porque se estaba deteriorando considerablemente porque había gente que hacía fuegos para cocinar bajo sus ramas», dice Rojas, que muestra como se le ha incluido un sistema de riego por goteo que ha hecho que esté frondoso y en perfectas condiciones. Este castaño, símbolo indiscutible de la Contraviesa, tiene un tronco que necesita de siete personas dándose la mano para poder rodearlo.
Lo fotografiamos a finales de otoño de 1986. Hoy hemos dado un rodeo de unos 100 km para ver cómo estaba (si aún estaba ...). Majestuoso, impresionante, frondoso, qué pena la valla que impide darle un abrazo y desearle larga vida. Cómo dijo el general McArthur:" yo volveré", aunque mejor..."volveremos". Saludos.
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